Una de las principales preguntas que una realiza un empresario al pensar en la sucesión de la gestión de la empresa, es a quien dejar la dirección una vez que se retire. Y esta decisión se complica más cuando es una Mype familiar. Una Mype familiar es una empresa en la que la propiedad se concentrada en un grupo familiar y la familia participa en la dirección de ésta.
En un país como el nuestro donde solo el 10% de las empresas familiares llegan a la segunda generación, es importante tomar conciencia sobre la sucesión de la dirección. Pero, ¿cómo se puede elegir sin que esto impacte en la empresa o en las relaciones de la familia?, ¿Cuales son los criterios que deben primar para elegir o designar a las personas que se harán cargo de la empresa?, ¿Cuáles son los intereses de llegar a la dirección de los posibles candidatos? ¿La dirección debe estar a cargo de miembros de la familia?
Todas estas preguntas, son validas y oportunas, sin embargo no dan solución a la decisión que se debe tomar. Se debe tener en cuenta que los criterios de meritocracia deben ser aplicados en el contexto empresarial familiar, de tal modo cualquier decisión que se tome debe basarse en la historia, compromiso, intereses, desempeño y competencias del posible candidato. De tal modo las preguntas se van transformando en ¿Quién puede liderar al equipo y generar el máximo desempeño de este? ¿Quién puede tomar las decisiones que más beneficien a los intereses de la empresa y la familia?, ¿Quién está comprometido con el negocio.
Una de las alternativas que no se debe dejar de lado, es dar la dirección a alguien externo, esto permite elegir al personal idóneo para el trabajo e impide generar enfrentamiento o acentuar rivalidades dentro de la familia.
Sin embargo, lo que se requiere es ser consciente de la importancia de formar a los futuros sucesores, involucrarlos en los procesos de la empresa y la toma de decisiones. Esto solo se podrá realizar si se planifica y se tiene una visión a futuro de la empresa ya que ello, permitirá contar con varios candidatos capaces y comprometidos dentro de la familia. También es importante generar un sentido de unidad y compromiso dentro de los miembros de la familia que cumplan roles como propietarios o empleados, porque la idea central es mantener el equilibrio entre los intereses de la empresa y los intereses de la familia. Estas pautas permitirán tomar en cuenta elementos importantes que contribuirán a elegir al sucesor indicado que velará por los interés de la familia y la empresa.
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